El apagón a la "maquinita" de emitir pesos se siente cada vez más en el mercado. La absorción de moneda por parte del Ministro de Economía en las licitaciones de deuda en el mercado local acentúa el efecto de la política monetaria del presidente Javier Milei. La estacionalidad de diciembre en la demanda de pesos lo exacerba.
La plaza seca de pesos está llevando a los inversores y empresas a vender divisas para atender los habituales compromisos de esta época del año. Ahora, incluso, la estrategia se estaría extendiendo hasta la venta de bonos soberanos en dólares contra pesos, lo que en parte explica la paz cambiaria y la pausa en el rally de la deuda.
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A los analistas de Outlier les resulta "extraño" que en las últimas jornadas no se observan movimientos en los rendimientos de los instrumentos en pesos y les da la impresión de que los tipos de cambio estuviesen encontrando un nuevo nivel para acomodarse, pero sin mucha correlación en el mercado de tasas en moneda local.
"Esto refuerza nuestra presunción de que, posiblemente, están faltando pesos en el mercado dada la última absorción del Ministerio de Economía en las licitaciones y, por ende, los inversores traten de conseguirlos a través de ventas de dólares en el mercado y bonos soberanos en dólares contra pesos", resalta la consultora.
Con el repunte de la demanda estacional de pesos y la poca de liquidez en el mercado, no debería sorprender que no sólo se estén vendiendo dólares cash, sino también que estén desarmando posiciones en títulos de la deuda soberana en dólares contra pesos (después de un gran rally) para hacerse de moneda doméstica, de acuerdo con Juan Manuel Franco, de SBS.
Franco señala que a la estacionalidad de diciembre se suma el superávit fiscal, lo que contribuye a la mayor demanda de pesos que se observa en las últimas semanas. Esto se evidencia, entre otras cosas, en la "debilidad en la curva de pesos a tasa fija, que viene con presión vendedora", precisamente por la venta de títulos del Tesoro en pesos estar más líquidos.
El especialista estima que la dinámica podría mantenerse hasta enero y afirma que el equipo económico del Gobierno estará atento a la evolución de la demanda de pesos durante las próximas semanas. Sobre todo, en febrero, cuando el efecto positivo de la estacionalidad termine de desaparecer.
De acuerdo con el economista Gustavo Ber, los inversores y empresas están recurriendo a distintas fuentes para hacerse de pesos y atender compromisos en moneda local y una de ellas es la venta de bonos soberanos en dólares contra pesos, lo que explicaría la estabilidad de estos activos tras las fuertes subas.
"Muchos tenían dólares atesorados, por el blanqueo de capitales o desde antes, y no los querían largar. Pero ahora ven que esos dólares valen cada vez menos y entonces en muchos casos están accediendo a venderlos porque se cansaron de aguantarlos tanto tiempo y prefieren cerrar posiciones a estos niveles", agrega el asesor financiero José Ignacio Bano.