Nuevo e importante hallazgo de la Oficina de Atención al Ciudadano (OAC) de la Comisaría Integral del Distrito de Usera. Agentes de la Policía Municipal han desbaratado el negocio de un matrimonio chino que, previamente a las próximas fiestas navideñas, vendía como reales falsificaciones de prendas de grandes marcas . Lo hacían, además, utilizando falsas facturas que pretendían simular el origen lícito de la mercancía. Los objetos recuperados, en el mercado del lujo, sumarían un importe de 400.000 euros, según las fuentes consultadas por ABC. Asimismo, dispensaban cosméticos y productos farmacológicos de origen asiático, prohibidos en España. Entre ellos, unos geles para luchar contra la candidiasis y demás enfermedades vaginales. El botín ha sido inmovilizado por las autoridades. Todo comenzó con una inspección el 3 de diciembre. A las 13.50 horas, los policías municipales entraron en el comercio textil de la calle de Nicolás Sánchez, 43, que hace un año ya fue objeto de una investigación de muy similares características. Por un lado, los funcionarios encontraron 881 unidades de medicamentos que solo tenían prospectos y grafismos en idioma chino. Pese, además, que se trata de un comercio supuestamente destinado a la venta de ropa y complementos. Las cajas carecían de cadena de distribuidores y de exportadores en España y la Unión Europea, lo cual supone una irregularidad enorme. Es más, afirmaron los investigados que los habían conseguido desde China mediante paquetería, vulnerando así todos los controles aduaneros existentes. Cabe preguntarse por qué estos filtros fallaron y si estas mafias asiáticas cuentan con cierta 'ayuda' en los puertos donde desembarcan la mercancía ilegal a cambio de una mordida económica. Además de productos cosméticos, estamos hablando de pomadas y geles utilizados por mujeres en sus partes íntimas para infecciones, lo que puede causar un quebranto en la salud pública. Por otra parte, los policías de la OAC de Usera descubrieron innumerables prendas (desde sudaderas a bolsos, cinturones, gorras o zapatillas deportivas) con origen también ilícito. Venían serigrafiadas con marcas tan exclusivas como Hermès, Louis Vuitton, Yves Saint Laurent, Balenciaga, Prada y Armani. «Lo realmente llamativo es la buena calidad de estas falsificaciones. Incluían una especie de facturas, también adulteradas, que dejaban dentro de los bolsos, por ejemplo, con el logotipo de la firma. Así daban la sensación de que estaban vendiendo piezas que realmente cuestan miles de euros en apenas unas decenas», indican fuentes del caso. El matrimonio chino investigado se enfrenta, por el momento, a un presunto delito contra la propiedad industrial; podría ampliarse a otro contra la salud pública, cuando se determine la naturaleza de la composición y origen de los geles vaginales. Se da la circunstancia de que estas mismas personas y ese mismo comercio ya fueron objeto de una investigación el 18 de octubre de 2023. El establecimiento, de 55 metros cuadrados, tenía a la venta 152 prendas textiles, calzado, bisutería y demás objetos de las marcas comerciales más prestigiosas. Se encontraban sin etiquetado, con faltas de ortografía en las garantías, precios inferiores a los habituales o decoloración de los estuches. Pero se hallaron más sorpresas: 244 productos cosméticos y 72 medicamentosos, con diversas irregularidades.