Lo echarán. Mañana mismo o la próxima semana. Pero
Manolo González no tiene la culpa del desastre que es este
RCD Espanyol. El lucense, debutante en Primera División, está tocando todas las teclas posibles, cambiando de sistema y de piezas constantemente y dando oportunidades a prácticamente todos los futbolistas de una plantilla cuyo nivel es el que es. Incluso a canteranos como
Justin Smith.Seguir leyendo...