“La marraqueta está más crujiente que nunca” y “la carrera (presidencial) no está ganada”, fueron los positivos saldos que sacaron internamente los presidentes de partidos oficialistas tras la segunda vuelta de gobernadores. Si bien los resultados significaron un retroceso respecto al número que el progresismo obtuvo en 2021, dejó a la centroizquierda con nueve gobernaciones, sin considerar al independiente René Saffirio (La Araucanía). Mientras, la oposición aumentó a seis.
Figuras de la alianza de Gobierno reconocieron sentirse ‘impresionados“, pues esperaban un escenario más desfavorable. La lectura interna es que la derecha sufrió un revés político al apostar realizar un referéndum a la gestión del Gobierno y no conseguir los triunfos que vaticinaban en las regiones Metropolitana y de Valparaíso, lo que impactaría sobre Evelyn Matthei, presidenciable de Chile Vamos y quién fue parte activa de las campañas.
De esa manera, se encendieron los ánimos de cara al próximo ciclo electoral de 2025, donde se elegirán parlamentarios, pero también un nuevo o nueva presidenta.
Tras los comicios, la vocera de Gobierno, Camila Vallejo, dijo estar satisfecha, destacando que “hoy día hay un 75% de la población que está siendo gobernada por elección de los ciudadanos, por un proyecto más progresista, basado en los derechos fundamentales”.
“Es una base importante para cualquier posible liderazgo futuro, y no nos corresponde a nosotros señalar cuál debiese ser el posible candidato o no, o decirle a uno que, a pesar que no quiera, debe ser candidato o no, pero sin lugar a duda, independientemente de que hay muchos liderazgos, lo importante es que hay una mayoría en el país que ha optado por propuestas y proyectos colectivos de carácter progresista“, declaró.
Bajo la misma línea de optimismo, el diputado liberal y único candidato presidencial formal del oficialismo, Vlado Mirosevic, destacó que Evelyn Matthei, candidata de Chile Vamos, “está más lejos de La Moneda que ayer” porque “la derecha está más dividida que nunca, está más peleada que nunca, está desorientada y no ofrece un proyecto de gobernabilidad. Esa es la verdad, el oficialismo está mucho más unido“.
Su par del Partido Comunista, Lautaro Carmona, en tanto, indicó que el resultado de este domingo golpea a la candidatura presidencial de Chile Vamos, porque “lo que era un cohete sin limitaciones, hoy día está tocando tierra más en concreto y vuelve a tener que hacerse conclusiones más terrenales, con cable a tierra y sin tanta arrogancia”.
La presidenta del Frente Amplio, Constanza Martínez, sostuvo que “hay un escenario abierto, que tenemos que ir trabajando con la ciudadanía. En ninguna forma tener una lectura hiper triunfalista, pero sí ser humildes en poder representar un esfuerzo de cambio para el país”.
Un matiz evidenció Efrén Osorio, secretario general del partido Acción Humanista, quién abogó por no caer en la “autocomplacencia”, teniendo en cuenta los vaivenes de la política: “Hay una señal de que tenemos que hacer bien las cosas siempre y que actuemos con mucha unidad y sin olvidar las transformaciones. Se ha derrotado los discursos de odio, pero eso no significa que ha triunfado una agenda tibia“.
De cara al próximo ciclo electoral, figuras del socialismo democrático tienen preocupación por la falta de claridad en las definiciones de los nombres que competirán en 2025, en comparación a la derecha. Considerando, además, que las cartas que se erigen como “bien evaluadas” se han negado a asumir esta aventura.
Entre ellas, la expresidenta Michelle Bachelet y el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic (FA), han descartado esta posibilidad en innumerables ocasiones.
Quién volvió a reiterarlo en esta jornada fue el gran ganador de estas últimas elecciones, Claudio Orrego. En el marco de la audiencia que sostuvo con el Presidente Gabriel Boric, Orrego insistió en su independencia y en que se va a mantener liderando la gobernación metropolitana.
“Mi único plan es ser gobernador los próximos cuatro años. Agradezco a las personas que piensen en uno, pero habrá que buscar a otros liderazgos hombres o mujeres del mundo del progresismo para encabezar esa tarea. Además, hoy día tengo a dos millones 500 mil personas que confiaron en mi y tengo que honrar ese compromiso”, dijo.
Sin embargo, para timoneles del FA y el PC, de cara a esta definición, primero, se debe llevar a cabo un debate de ideas y zanjar el proyecto que ofrecerán como sector al país. Por lo pronto, hay consenso de primarias lo más amplias posibles.
La presidenta del Frente Amplio, Constanza Martínez, indicó que: “Creemos que primero debe haber una discusión de proyectos y luego de nombres, y en eso no tenemos ansiedad, sino que por el contrario hay urgencia, pero también pensando en poder ofrecerlo un proyecto al país”.
En esa línea, aseguró que “todos caben en una idea de progresismo lo más amplio posible para poder hacer frente a la ultraderecha”, incluso sectores por fuera, como la Democracia Cristiana.
Por su parte, el líder del Partido Comunista, Lautaro Carmona, señaló que “donde hubo unidad los resultados fueron muy positivos, donde lamentablemente hubieron alternativas dentro del sector, debilitaron la propuesta y eso marcó la primera y segunda vuelta. Es parte de la experiencia que nosotros vimos en Coquimbo”.
Junto a Vlado Mirosevic, también competiría en esta primaria la ministra del Interior, Carolina Tohá, pese a que cumplió dos meses siendo la peor evaluada del gabinete según la encuesta Cadem, y ha sido foco de las críticas por el manejo del caso Monsalve.
Al respecto, la presidenta del Partido Socialista, Paulina Vodanovic, sostuvo que “lo coyuntural pasa, la carrera política de la ministra Tohá es por todos conocidos, su trayectoria, el rol que ella tiene en el Gobierno, en conducir la agenda de seguridad y, por lo tanto, su característica principales son esas, su trayectoria, su forma de conducción, y lo presidencial lo evaluaremos en su momento”.