La fundación FAES, en un artículo sobre lo que "corrupción asimétrica" se adentra en lo que denomina como el "laboratorio de Pedro Sánchez" donde advierte de cómo "la corrupción progresista es menos corrupción". Además, le da un toque de atención al Partido Nacionalista Vasco, quien ahora se viste de izquierdas y quien encontró determinadas "asimetrías" a la hora de retirar la confianza a Mariano Rajoy en 2018 por la "corrupción" sin embargo ahora ve diferencias con el caso que atañe a su nuevo socio, Pedro Sánchez.
FAES destaca la "asimetría" del PNV entre el "caso Gürtel' y recuerda que fue eso lo que le llevó a apoyar una moción de censura contra el Gobierno de Mariano Rajoy y la "corrupción" que, a su entender, afecta al entorno del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y al PSOE. Según añade, se ve que "hay corrupciones y corrupciones, igual que hay sentencias y sentencias" y "socios y socios".
Para la fundación que preside el expresidente del Gobierno, José María Aznar, "es tan fina, tan 'jurídica', la distinción de los socios del PNV entre aquella sentencia de 2018 sobre la Gürtel -toda una sentencia- y este rosario de imputaciones... Y, además, en euskera se dice igual, pero sin tilde: 'asimetría'. Paso pues a lo asimetriko: censura de Rajoy, apoyo a Sánchez (una vez garantizadas las inversiones comprometidas, eso sí)", asegura.
Señala que la sentencia del Tribunal Supremo de 2020 recordaba, en referencia a la de la Audiencia Nacional de 2018 que sirvió como "detonante para la moción de censura contra Rajoy", que "la única responsabilidad del PP en el asunto era 'civil y subsidiaria' y que, por tanto, 'no puede afirmarse que el Partido Popular fuera autor de delitos de corrupción y prevaricación irregular'". Además, apunta que "solo se le exigió al PP responsabilidad civil y no penal".
"Como se ve, hay corrupciones y corrupciones, igual que hay sentencias y sentencias, como hay socios y socios. En esto, la 'asimetría' sirve para aventar escrúpulos morales o jurídicos y hacer lo que más conviene. Que no le vengan al PNV con sentencias del año 2020. La del 2018 le sigue valiendo. Prior tempore potior iure, dirá", asegura FAES en un análisis titulado 'Sobre corrupción asimétrica o de cómo la corrupción progresista es menos corrupción'.
Es más, la fundación apunta a la posibilidad de que el Congreso Federal que el PSOE celebra este fin de semana se pueda acuñar el concepto de "corrupción asimétrica" para "casos como los que sitian Ferraz, varios ministerios, Moncloa, y ponen cerco judicial al entorno más cercano del presidente del Gobierno". "Cosas más escandalosas hemos visto. Rasgos de caradura moral más graníticos en tanto atleta de la hipocresía", añade.
FAES advierte de que "tratándose de Sánchez y su séquito, no puede descartarse nada. Salvo una cosa: actuar, en algo, de forma similar a como hizo o haría el Partido Popular. ¿Por qué? Por aquello de la asimetría, naturalmente". De esta forma, considera que para los socialistas, "combatir la corrupción o defenderse de las imputaciones de practicarla no es un ejercicio político, ni legislativo, ni nada de eso; es cuestión, como siempre, de “relato”, es decir, de volver a colocar a la opinión pública una nueva batería de trolas. Que nadie espere verles tomar decisiones efectivas".
Asimismo, augura lo que no hará el PSOE en el escenario en el que se encuentra: "No se tipificará como delito la financiación ilegal de los partidos políticos: eso ya lo hizo el PP; ni se endurecerán las penas de los delitos relacionados con la corrupción: también lo hizo el PP; ni se creará una Oficina de Recuperación de Activos para rescatar bienes que el corrupto esté obligado a devolver; ni se prohibirá que los bancos condonen deudas a los partidos políticos: ya está hecho; ni hace falta obligar a los partidos a presentar sus cuentas anuales al Tribunal de Cuentas: lo hacen tras determinarlo así un gobierno popular. Sin contar reformas sobre fraude fiscal, prevención del blanqueo de capitales, regulación del ejercicio del alto cargo…" Y sentencia: "Que nadie espere verles tomar decisiones efectivas".
FAES considera que "lo peor de la deprimente función barriobajera" a la que están asistiendo es que "mina todavía un poco más la confianza de los ciudadanos en las instituciones". "La desafección ciudadana que provoca es un problema que resolver, no un estado de ánimo que poder explotar", agrega.
Por eso, cree que "todo Gobierno digno de tal nombre no se dedicaría a escurrir el bulto o a improvisar mentiras en materia de corrupción, ni a magnificar unos casos en detrimento de otros atribuyendo color político al peculado" sino que "se aplicaría a estrechar los márgenes y dificultar las conductas irregulares, a mejorar los procedimientos de detección de tales conductas y a endurecer la sanción que merecen".
Según FAES, "durante mucho tiempo la izquierda ha mirado la corrupción -o las conductas machistas, por ejemplo- tapándose un ojo". Por eso, dice que su reacción ante "la viga en el propio" suele "ser ridícula".
Con todo ello, la Fundación cree que en el próximo Congreso del PSOE "solo puede darse por descontada la enésima teorización de la ley del embudo y una nueva ordalía polarizadora". "En un cónclave sanchista, siempre se hablará más de la derecha que de la izquierda. Ya se sabe, la asimetría", concluye.