En el corazón de Lima, un barrio enfrenta un problema que parece sacado de una película de desastre: su suelo está cediendo. Desde 2006, esta urbanización muestra signos de hundimiento progresivo, afectando viviendas, parques y calles. Más de 60 familias conviven con el riesgo diario de estructuras inclinadas y desniveles peligrosos. El colapso de la urbanización simboliza la gravedad de un problema de más de 10 años.
El deterioro del terreno ha transformado un importante distrito de la capital en un caso emblemático de la fragilidad de algunas áreas urbanas de la ‘Ciudad de los Reyes’. A pesar de los reclamos de los vecinos y estudios preliminares, las soluciones concretas parecen lejanas. Los residentes enfrentan no solo el impacto físico, sino también emocional y económico que este fenómeno acarrea.
El problema no es reciente, desde 2006 los vecinos de la urbanización Limatambo, en el distrito de Surquillo, enfrentan una situación crítica: el terreno donde se levantan sus viviendas se está hundiendo. Este fenómeno ha provocado que las estructuras de la zona, como casas y edificios, presenten grandes grietas y que el nivel del piso haya descendido hasta en 40 cm de su nivel normal.
La causa principal de este hundimiento radica en que las edificaciones fueron construidas sobre una antigua cantera de hasta 30 metros de profundidad, la cual fue rellenada con desmonte de diversas procedencias, incluyendo residuos sanitarios y de construcción, durante la construcción de la Vía Expresa de la avenida Paseo de la República, lo que dificultó la correcta compactación del suelo.
En una ocasión, los vecinos expresaron en Canal N que el terreno fue vendido a antiguos empleados del Banco de la Vivienda, quienes, sin realizar estudios adecuados sobre la calidad del suelo, decidieron construir en esta zona. Este error ha llevado a un colapso del sistema de tuberías de agua y desagüe, aumentando el riesgo de un desastre mayor en caso de un sismo de gran magnitud.
Un análisis del Instituto Geofísico del Perú (IGP), compartido por Infobae, destacó serias preocupaciones sobre la naturaleza del terreno en este sector de Lima. El estudio determinó que el suelo se compone principalmente de material de relleno, con profundidades variables entre 5 y 30 metros, asentado sobre un conglomerado aluvial más firme. Este material presenta vulnerabilidades, como zonas con alta humedad, lo que incrementa la probabilidad de hundimientos y deformaciones estructurales en la urbanización.
Los especialistas han creado un mapa geofísico de zonificación que señala las áreas más susceptibles en el vecindario, enfocándose en aquellas con mayor humedad, consideradas de alto riesgo. Este estudio advierte sobre los posibles efectos devastadores en caso de un sismo de magnitud moderada a alta, que podría generar movimientos, hundimientos y desniveles graves en el terreno, pudiendo ocasionar una tragedia.
Actualmente, recorrer Limatambo es como entrar en un escenario de contraste. Por un lado, hay viviendas resquebrajadas e inclinadas, calles con fisuras profundas y parques cuyos desniveles revelan la magnitud del hundimiento, como en el cruce de Los Cuculíes y Los Faisanes. Por otro lado, la resiliencia de los residentes es evidente. A pesar de las adversidades, más de 60 familias permanecen en la zona, adaptándose como pueden a las condiciones.
Surquillo, distrito creado por la Ley 11058 el 15 de julio de 1949, se encuentra estratégicamente ubicado en el centro de Lima. Limita al norte con San Isidro y San Borja, al este con Santiago de Surco, al sur y oeste con Miraflores. Esta posición lo convierte en una zona atractiva para proyectos inmobiliarios, pero también resalta la urgencia de resolver problemas como el de Limatambo para preservar su habitabilidad.