Poco acostumbrada a protagonizar voluntariamente momentos en los platós de televisión, María José Campanario en los últimos meses parece haber enterrado el hacha de guerra con los medios de comunicación para abrirse a ser un nuevo rostro de los programas. La mujer de Jesulín de Ubrique participaba junto a su marido a principios de septiembre en 'Emparejados', el formato de Antena 3 presentado por Joaquín Sánchez y su esposa, para conceder su primera entrevista conjunta en su vida de crónica social. Este mes de noviembre, la odontóloga reaparecía en el mismo canal pero esta vez bajo el disfraz de oveja en 'Mask Singer', una nueva oportunidad televisiva, no exenta de polémica al arrebatarle la máscara a Belén Esteban , con la que se lo pasó «feliz» en contraste con la situación que atraviesa. Esta aparición, que llevaba un tiempo grabada, llegaba en un momento en el que Campanario se había visto en la obligación de pasar por quirófano en el hospital. La información que trascendió es que ella permanecía ingresada y que había sido vista con un ojo vendado, algo por lo que en algunos medios como 'Espejo Público' apuntaron que su estado de salud parecía grave. Aunque emitió un comunicado público para dar las gracias a todo el equipo médico que había estado cuidándola y atendiéndola en su bache, no quiso dar más detalles de la afección real en los ojos por la que había terminado necesitando intervención sanitaria. Semanas después de salir, la odontóloga recurría al cambio de actitud que aplicó a sus redes sociales, por el que las hizo públicas, para lanzar una significativa reflexión con la que dejaba claro que ya se encontraba bien y ya recuperada de su problema de salud. «Practica la crítica inversa. Dedica un día a escribir cosas bonitas en sus redes sociales. Verás que el mundo es mucho más satisfactorio que lo contrario», expresaba en su perfil personal de Instagram. Ahora, la mujer de Jesulín ha vuelto a hablar para sus casi 70 mil seguidores para sincerarse como nunca de la enfermedad crónica que padece. En los 'stories' de su cuenta ha encontrado la manera de regalar a sus 'followers' mensajes todos los días a modo de diario para relatar experiencias propias, anécdotas o incluso consejos vitales y reivindicativas defensas. La última ha sido acerca de su aspecto físico y de su salud a raíz de algunos comentarios que había recibido. Así, la odontóloga ha querido aprovechar para sincerarse sobre los efectos que arrastra por la fibromialgia crónica que padece y que provoca en los pacientes dolores persistentes que condicionan su vida. Según ha expresado, tiene «días buenos, malos y regulares» en los que debe limitar en las comidas los alimentos proinflamatorios, una medida que se suma al estricto control del gluten o la lactosa a los que tiene intolerancia. «Me he quitado algunos alimentos y eso ha reducido bastante la inflamación. Además, procuro hacer el ejercicio que puedo», afirma quien también sobrelleva su condición haciéndole frente día a día. «Gestiono como puedo, como todas», ha reconocido en su mensaje con el que espera «sirva de ayuda» a todos aquellos que padezcan la misma enfermedad o conozcan a alguien en su misma situación. Pero ante las posibles críticas que pueda recibir por publicar su experiencia en vídeo, ha dejado claro a los que tuviesen intención de comentar «qué me he hecho en la cara», que «solo he cogido peso. Ya está», terminaba de decir.
