Emmanuel Macron inició este miércoles una visita a Chile, donde se reunirá con el presidente Gabriel Boric y resaltará la relación con este país en momentos en que Francia critica un posible acuerdo de libre comercio con el Mercosur.
El jefe de Estado francés llegó a Santiago la noche del martes procedente de Rio de Janeiro, donde participó en la cumbre del G20, tras una primera escala en la Argentina del ultraliberal Javier Milei, admirador de Donald Trump y tentado como el presidente electo de Estados Unidos a dar la espalda a varios compromisos multilaterales.
Si bien el presidente argentino no bloqueó el comunicado final del G20, Macron se alegró el martes de que Buenos Aires "se haya mantenido dentro del consenso" que era el objetivo que se había fijado cuando se reunió con el controvertido líder.
Con Gabriel Boric es un poco a la inversa. "Los dos presidentes comparten la misma visión de la importancia del multilateralismo", sostiene el Elíseo.
Se ha previsto que ambos mandatarios hagan una declaración a la prensa al mediodía en el palacio presidencial de La Moneda y se espera que los dos países firmen un acuerdo para crear un centro franco-chileno dedicado a la inteligencia artificial.
Macron también se reunirá con el cardenal Fernando Chomali, arzobispo de Santiago, "para no olvidar el papel de la Iglesia chilena en la protección de los opositores en la época de la dictadura" militar de Augusto Pinochet (1973-1990), según el Elíseo.
El jueves, antes de retornar a París, Macron viajará a Valparaíso (120 km de Santiago) para pronunciar un discurso ante el Congreso sobre la relación con América Latina.
Macron busca poner al día la presencia de Francia en una región que ha visitado poco desde su primera elección hace siete años. Aunque se intensificaron los intercambios con Brasil desde que el presidente Lula regresó al poder, aún no había expuesto en detalle su visión de las relaciones entre Francia y América Latina.
En el G20 también se reunió con la nueva presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, y con el colombiano Gustavo Petro.
En Chile, que no es miembro del Mercosur, a diferencia de Argentina y Brasil, Macron hablará sobre temas comerciales en momentos que este bloque regional resuena insistentemente en las noticias francesas.
En Francia, los agricultores han retomado su movilización menos de un año después de una revuelta histórica para protestar en particular contra el acuerdo de libre comercio con el Mercosur que la Comisión Europea, impulsada por países como Alemania y España, estaba determinada a firmar antes de fin de año.
A ojos de Macron, este texto conduciría a una competencia desleal, como por ejemplo, una avalancha de carne argentina o brasileña no sujeta a los estrictos estándares sanitarios y ambientales de la Unión Europea.
Pero en Santiago y luego en Valparaíso, tiene la intención de destacar el acuerdo comercial que existe entre la Unión Europea y Chile, un tratado que se considera un modelo ya que incluye el respeto a las normas europeas.
"Por eso también hablará en Chile, porque es con este país con el que hemos podido llegar lo más lejos posible en la convergencia en temas ambientales o comerciales", según su entorno.
Emmanuel Macron y Gabriel Boric visitarán el jueves el rompehielos "Almirante Viel" de la Marina chilena, que fue puesto en servicio este año, antes de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos programada para junio en Niza, Francia.
"Este buque representa el compromiso de Chile con la seguridad marítima y la investigación científica para estudios de oceanografía, hidrografía, biomasa y fauna marina", escribió la presidencia chilena en un comunicado.
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