Óscar Puente comparece este viernes en el Senado para dar explicaciones por el «caos» ferroviario que está habiendo en las últimas semanas con muchas incidencias en los trenes y por el «caso Koldo», ya que hay dos altos cargos del Ministerio que han sido imputados, pero siguen sin ser cesados.
El PP ha forzado la comparecencia en la Comisión de Transportes del Senado ya que tiene el control de la Cámara gracias a la mayoría absoluta que logró el 23 de julio, mientras que las peticiones que ha hecho en el Congreso han caído en saco roto ya que ahí el PSOE y Sumar tienen la mayoría.
El «caos» ferroviario que se ha producido en las últimas semanas, con múltiples incidentes por toda España, pero con especial repercusión en Madrid y la estación de Chamartín, ha afectado a mucha gente y ha desatado una gran ola de indignación. Mientras tanto el ministro sigue echando balones fuera y sacudiéndose todas las responsabilidades pese a que el PSOE lleva ya seis años gobernando. De hecho, con el PSOE en el Gobierno, año tras año, los trenes sufren más y más retrasos: en 2023, una cuarta parte de los trenes de alta velocidad y larga distancia llegaron con una hora o más de retraso, un porcentaje que hace cinco años se situaba por debajo del 15%. Ese aumento de los retrasos ha obligado al ministro a modificar la política de indemnizaciones por impuntualidad de Renfe, que ha pasado de devolver todo el billete cuando llegaba media hora más tarde de la prevista a hacerlo cuando llega una hora y media más tarde.
La gestión del ministro está siendo muy cuestionada en los nueve meses que lleva al frente de Transportes, pero también está generando polémica cómo está tratando el «caso Koldo» ya que hay dos altos cargos que están investigados y siguen sin ser cesados. En concreto, son el subsecretario de Transportes Jesús Manuel Gómez y el director general de Gestión de Personas de Adif Michaux Miranda, que han sido llamados a declarar en septiembre.
