El Sevilla FC y el Club Atlético River Plate han hecho oficial este martes lo que era un secreto a voces: Marcos Acuña regresa al fútbol argentino para jugar en el cuadro bonaerense. El internacional con la albiceleste, vigente campeón mundial y continental, abandona Nervión a coste cero. El cuadro blanquirrojo prioriza el ahorro salarial que se desprende de la salida del futbolista de 32 años y podría ingresar más adelante una serie de bonus fijados ya en el pacto entre los clubes en función del rendimiento que tenga el jugador. En el Sevilla catalogan estas variables «de fácil cumplimiento». El Sevilla se desprende de este modo de un futbolista que ha disputado durante las últimas cuatro temporadas un total de 149 partidos como sevillista anotando seis goles. Los nervionenses ya dejaron salir bajo esta misma fórmula a jugadores como Dmitrovic, Óscar o Augustinsson este verano y a Rony Lopes por ejemplo en 2023, todos ellos con un rendimiento notablemente inferior al ofrecido por Acuña hasta el momento de su marcha. Con Adrià Pedrosa como único lateral zurdo disponible ahora en la plantilla de García Pimienta, Víctor Orta y su equipo de trabajo se afanan en conseguir incorporar a un lateral zurdo siendo Javi Galán una de las opciones tanteadas. Marcos Acuña apunta a no ser el último en salir. En el club trabajan en encontrarle destino a Gonzalo Montiel (cerca del PSV como cedido) y a Joan Jordán, mientras que Loïc Badé, jugador con el que se quería hacer caja, ha rechazado las opciones que tenía de abandonar Nervión por el momento. El equipo argentino comenzó a lanzar publicaciones para anunciar el fichaje de Acuña en su cuenta oficial de X con una curiosa forma. Cambió su foto de perfil con un huevo de color blanco sobre color rojo. 'Huevo' es el mote de Acuña y los colores rojo y blanco son los colores oficiales del River Plate. Acompañó la foto con el mensaje «en minutos recuperaremos nuestra foto de perfil habitual, disculpe las molestias ocasionadas».
