La eliminación del Olympique de Marsella en la previa de la Champions League tras caer en su eliminatoria con el Panathinaikos griego ha sido una losa para el inicio de la temporada en el conjunto francés. El batacazo continental desterró las ilusiones creadas con el fichaje del nuevo técnico, Marcelino García Toral . Apuesta personal del presidente, el también español Pablo Longoria, podría ver su futuro ligado al del su jefe, foco de las iras de los ultras marselleses. La decepción europea, algunas decisiones controvertidas a la hora de confeccionar la plantilla y los primeros tropiezos ligueros, como el empate sin goles ante el Toulouse de este fin de semana han hecho la situación irrespirable en el club del sureste de Francia , que cuenta con el lastre de tener uno de los grupos ultras más calientes del país, con una gran capacidad de presión sobre la institución. Este domingo el Marsella tenía en sus manos, en el estadio Velodrome, la oportunidad de asaltar el primer puesto de la 'Ligue 1', pero la igualada lo dejó en la cuarta plaza tras el Mónaco, el Brest y el Niza (3º). El choque acabó con una gran pitada en el estadio, con los hinchas pidiendo a sus jugadores que defendieran la camiseta con mayor ahínco. Reunión con los ultras Ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los hinchas radicales, cuyos cabecillas participaron este lunes en una reunión con varios dirigentes de la entidad , entre los que se encontraba el propio Longoria. En el cara a cara reprocharon al presidente lo que ellos consideran errores en la gestión de la plantilla y en la planificación de la temporada, y le acusaron de tirar por tierra la identidad del club. Motivos por los que le solicitaron, con malas formas y amenazas, que dimitiese y abandonase el sillón presidencial. Este escenario de máxima tensión ha provocado que Longoria, tras recibir incluso amenazas de muerte, se esté planteando dejar su cargo. Así lo anunció Eurosport , que explicó que el dueño del Olympique de Marsella, el empresario estadounidense Franck McCourt , iba a contactar con el presidente para tratar de evitar su marcha. También con Marcelino, pues pese a no estar presente en la reunión del lunes, el técnico español está igualmente en el centro de la diana de los radicales y habría vinculado su permanencia en el club a la de Longoria, quien le eligió para sentarse en el banquillo marsellés. El diario L'Equipe avanzó incluso que el exentrenador de Sevilla, Valencia, Villarreal o Athletic había comunicado al vestuario su marcha . Sin embargo, horas después su entorno aclaró que lo único que había hecho el técnico era explicar a sus futbolistas las amenazas recibidas por el presidente. Noticia Relacionada Fútbol reportaje Si La expropiación saudí del fútbol Gonzalo Cabeza La ambición, consistencia y futuro de una Liga salvaje que revoluciona el mercado y alarma a Europa, explicados por los agentes que han tenido que adaptarse para participar en ella Movido en lo social, en lo deportivo su inicio de curso es más que pasable. Más allá de la decepcionante eliminación de la Champions , el arranque de la temporada del Marsella en la liga francesa no es malo, pues ha sumado 9 puntos de 15 posibles y marcha en cuarta posición de la 'Ligue 1'. Ahora, este inaudito incendio creado por unos radicales que ensucian una vez más la imagen del fútbol francés, amenaza con terminar de desintegrar el proyecto «español» del Olympique de Marsella , con el que iba a tratar de pelear con el dominio del París Saint-Germain y volver a destacar en Europa. Y todo ello con la cita continental con el Ajax de Amsterdam, en el marco de la Europa League, a la vuelta de la esquina, y la posterior visita al parisino Parque de los Príncipes para enfrentarse a los Luis Enrique, Mbappé y compañía .