MADRID, 1 (CHANCE)
Lo último que sabemos de Ana María Aldón es que cogió sus pertenencias de casa de José Ortega Cano y se marchó porque estaba completamente superada por la situación que estaba viviendo en su casa. Una decisión que hacía saltar las alarmas y que provocaba el enfado del torero ante las cámaras de la prensa al ser preguntado por una posible crisis matrimonial con su mujer.
Hoy, José Ortega Cano, que sigue guardando silencio acerca de todas las polémicas que hay servidas en su vida, se ha dejado ver entrando en su casa Cano. Con mascarilla y gafas de sol, el torero se muestra de lo más serio y no confiesa si acudirá a la inauguración del museo de Rocío Jurado en Chipiona.
Minutos más tarde, el diestro ha hecho un movimiento que nos ha dejado muy sorprendidos. José Ortega Cano salía de su casa con una maleta y, segundos más tardes salía también Marina, la trabajadora del hogar del torero, y su hijo José María. El torero, que se muestra de lo más serio y parco en palabras con la prensa, saluda a la persona que le recoge en coche, le da dos besos a la asistenta del hogar y otros dos a su hijo, fundiéndose con este en un tierno abrazo.
El todavía marido de Ana María Aldón no ha querido desvelar si va a Chipiona a ver el museo de Rocío Jurado y cómo está su relación con su mujer, mostrándose de lo más serio ante las cámaras de los medios de comunicación que se encontraban en las puertas de su hogar en Madrid.
