«Nosotros somos leales, no imbéciles», ha espetado este jueves el vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea. Esta vez, después de comprobar una vez más que a las puertas de otro periodo clave por la mayor movilidad –en este caso la Semana Santa– para el control y la evolución de la pandemia del Covid-19, el Gobierno central vuelve a hacer dejación de funciones y endosar a las comunidades la adopción de más restricciones. Y es que el orden del día del Consejo Interterritorial del Sistema de Salud celebrado el miércoles incluía un «punto 3» bajo el epígrafe «nuevas medidas». Sin embargo, la reunión entre Ministerio de Sanidad y comunidades se levantó sin nuevas decisiones, el mantenimiento de las ya acordadas hace días y dejando, eso sí, la puerta abierta a que sean las autonomías las que aprieten un poco más o no. Todo después de una mañana en la que más que un «globo sonda» se lanzó un «zepelín» sobre la posibilidad de adelantar el toque de queda o el cierre de la actividad no esencial a las 20.00 horas –sobre los que Castilla y León no fue consultada previamente–, pero que ni siquiera se llegó a abordar en la cita vespertina.
Una forma de actuar por la que Igea ha mostrado su «disgusto» y tachado de «cobarde». Como lo fue también con Navidad, cuando la tercera ola del coronavirus se encrespaba. Entonces, en el horizonte estaban las elecciones en Cataluña. Ahora, el adelanto de la cita con las urnas en Madrid para el 4 de mayo. Y es que el vicepresidente de la Junta se ha mostrado convencido de que además de actuar de forma «cobarde», el Ejecutivo de Pedro Sánchez lo hace también en este asunto de la crisis sanitaria del coronavirus de manera «electoralista».
El «rayito de esperanza» a una nueva forma de proceder iluminado con la llegada de Carolina Darias al frente del Ministerio de Sanidad en sustitución de Salvador Illa ya se ha apagado. Lo ha hecho a la vez que se encendía la cuenta atrás para las elecciones en Madrid, de modo que «volvemos a la misma estrategia», ha censurado el vicepresidente.
Igea ha incidido en que la postura de la Junta de Castilla y León es «exactamente la misma de siempre», la de «respaldar» al Ejecutivo de la Nación si toma medidas restrictivas. «Si alguna vez no hemos estado al lado del Gobierno es cuando se comporta de forma cobarde o electoralista», ha añadido el portavoz. ¿Y cuándo actúa de forma cobarde? «Cuando no quiere asumir decisiones» y «traslada» la responsabilidad a las comunidades en un modo de proceder que «ya saben muy bien los ciudadanos», a los que «se empieza a agotar la paciencia», ha clarificado Igea, en referencia a que esta vez tampoco ha dado el paso al frente para adoptar nuevas restricciones cuando la cuarta ola del Covid-19 asoma. Y es que, ha apuntado, el estado de alarma en vigor «permite» al Gobierno adoptar un tipo de medidas, pero también «impide» a las autonomías aplicar algunas.
El vicepresidente ha insistido en defender que la Junta hace «lo contrario» al Ejecutivo central:«Apoyarlo» en las decisiones «difíciles» incluso «si no las compartimos». Por eso, ha expresado el «disgusto» de Castilla y León con esta forma de actuar «tan calculada, evidente y bochornosa» y el malestar con la «permanente ilusión de responsabilidad de nuestro Gobierno».
Ejemplo de Merkel
«Adoptar medidas no es estar todo el día en el espectáculo», ha recriminado el portavoz. Y ha mostrado su satisfacción con lo vivido el miércoles en Alemania y que no ocurría «en mucho tiempo»:«La presidenta del Gobierno pidiendo perdón» «Ya me gustaría tener un gobernante como Angela Merkel», ha reiterado.
«De momento», la Junta descarta adoptar más restricciones de las que ya hay y que desde hoy incluyen nuevas, al igual que en el conjunto de España, como las reuniones en espacios privados sólo entre convivientes, mientras sigue el cierre perimetral de la Comunidad. Eso sí, aunque no está permitida la movilidad entre autonomías, sí lo está la llegada de extranjeros, una medida que «carece de sentido. No tengo otra opinión que la del común de los mortales», ha señalado Igea.
La situación epidemiológica del Covid-19 en Castilla y León permanece «estable, con discreto crecimiento» en las últimas semanas, por lo que el portavoz ha incidido en recomendar la limitación de movimientos y contactos y «extremar la prudencia» para «evitar en lo posible» la cuarta ola.
