Este 26 de septiembre, París fue de nuevo testigo del desfile de Juana Martín para la primavera. Cuando se cumple un año de la declaración de Medina Azahara como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, una cordobesa de pro, Juana Martín, ha homenajeado a su tierra dedicando una preciosa serie de vestidos blancos a la que fue la ciudad palacio más brillante de la historia.
En la elegante Fondation Dosne Thiers, como lleva haciendo desde hace varias temporadas, Juana Martín, que mostró a su recién nacido bebé en el saludo final, solamente salpicó de negro un par de modelos de noche espectaculares, rindiendo culto a la tendencia actual de la bambula, el organdí, el blanco y las transparencias.
Los tejidos fluidos y el impecable corte de las prendas, otorgaron un gran movimiento a los vestidos. Los volantes, su especialidad, cerraron majestuosos el desfile sin un ápice de cursilería.
Tolentino Haute Hats estuvo de nuevo a cargo de los tocados, que evocaban la belleza y geometría de la antigua ciudad califal. Juana Martín se consolida conquistando París con su aire andaluz.
