Con el objetivo de «despolitizar» la dirección de IDEA, «agilizar» su gestión y «reforzar» sus controles y la seguridad jurídica del organismo, el consejero de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, Rogelio Velasco, informó ayer al Consejo de Gobierno de la reestructuración que llevará a cabo su departamento en la agencia, ya que, según el consejero de presidencia y portavoz de la Junta, Elías Bendodo, IDEA «no es un brazo ejecutor de decisiones políticas, un generador de obstáculos o un caso judicial». Ya ocurrió con las listas de espera de sanidad y en dependencia y ahora en esta agencia que recibirá una inyección de casi 1.260 millones de euros en ayudas para el desarrollo y la competitividad de las empresas andaluzas. Más de 2.600 solicitudes estaban pendientes de análisis y solo se había ejecutado el 6 por ciento de lo presupuestado, es decir, 31 millones de un total de 521. Se trata de «otro bloqueo en la administración», subrayó Bendodo, correspondiente a cinco años y que afecta a «empresas esperanzadas en seguir creciendo» y que «están a la espera de esa ayuda prometida que no llega».
De momento, la Junta ha cesado a los gerentes provinciales de IDEA, tras constatar que «en ningún caso tenían las competencias profesionales adecuadas para ejercer este cargo», señaló Velasco. Se trata de personal laboral y no se contempla, tal y como aseguró, que vayan a seguir prestando servicios en la Junta. Ahora estas funciones las desarrollarán los secretarios generales provinciales de la Consejería de Economía, que son funcionarios de carrera. Además, la cúpula directiva –secretario general y los directores de Inversiones Estratégicas y de Espacios de Innovación– serán elegidos mediante convocatoria pública y abierta.
Como ejemplo del bloqueo en la agencia, Velasco recordó que uno de los proyectos de mayor envergadura, la Iniciativa Territorial Integrada (ITI) de Cádiz, está pendiente de ejecutar al 97 por ciento.
