El 31 de marzo es la fecha de la nueva prórroga para decidir el futuro de la colección Carmen Thyssen. Apenas faltan dos días para alcanzar un acuerdo u optar por prolongar el que existe. Y parece que se hará lo segundo y se extenderán noventa días más las negociaciones, pues todo apunta, según ha podido confirmar este diario, que se está negociando un acuerdo sobre las condiciones de cesión de su colección privada a España "por 15 años, prorrogables de 5 en 5 años", según ha anunciado el titular de ese departamento, José Guirao, en una entrevista con Efe. Las conversaciones, ha afirmado el ministro, "están muy avanzadas" y ya se ha establecido que será "un acuerdo a medio plazo" con un horizonte temporal "muy amplio". "Estamos viendo cuál es la mejor opción y barajando distintas posibilidades. Carmen Thyssen quiere a toda costa que su colección se quede donde está y la voluntad firme del Ministerio es que se quede. Es decir, hay dos pilares de voluntad pero tenemos que asegurarse una serie de cosas", ha subrayado. El acuerdo, ha añadido, es "algo muy laborioso" y se está llevando a cabo con ella sola, no con sus herederos.
El préstamo de la colección propia de Carmen Thyssen se firmó en 1999 por diez años y se fue actualizando de forma anual desde 2011. En 2016 se renovó la cesión por seis meses y, desde enero de ese año, se han ido sucediendo distintas prórrogas, cada una de tres meses, excepto las acordadas en julio de 2017 y diciembre de ese mismo año, que fueron de nuevo de seis meses.
La viuda del barón Thyssen pretendía, según sus últimas declaraciones al respecto, que le permitan "movilidad" para sus cuadros, que ella valora en más de mil millones de euros. En las negociaciones, según explicaba la baronesa a finales de 2017, están implicados el Ministerio de Cultura y Deporte, la Fundación Thyssen-Bornemisza, la Dirección General de Bellas Artes y Patrimonio Cultural, y el Ministerio de Hacienda. La colección de Carmen Thyssen está compuesta por 429 obras maestras de autores como Matisse, Picasso, Canaletto, Rodin o Gauguin y su famoso "Mata Mua", depositadas de manera gratuita en el Museo Thyssen. Esta colección privada de Carmen Cervera no tiene nada que ver con la colección permanente del Museo Thyssen, que incluye 775 obras de arte de su esposo, el fallecido barón Heinrich Thyssen-Bornemisza, por la que el Estado pagó 264 millones de euros en 1993.
