La cápsula Crew Dragon de SpaceX —que no estaba tripulada— amarizó en el Océano Atlántico tras una corta estadía en la Estación Espacial Internacional, culminando la primera misión orbital de prueba de la NASA para su proyecto de reanudar los viajes espaciales con humanos desde territorio estadunidense este año.
Tras una misión de cinco días en el puesto orbital, la Crew Dragon se desacopló de forma autónoma y regresó a la Tierra alcanzando velocidades hipersónicas, al caer en el Atlántico, a unos 300 kilómetros de la costa de Florida.
Successful splashdown of the #CrewDragon right on time at 8:45 a.m. ET. pic.twitter.com/0qHhHzD4Js
— NASA Commercial Crew (@Commercial_Crew) March 8, 2019
Un cohete Falcon 9 de unos cinco metros de longitud de la compañía SpaceX, propiedad del magnate tecnológico Elon Musk, lanzó la cápsula desde el Centro Espacial Kennedy en Florida el pasado sábado 2 de marzo.
La misión, que precede al vuelo de prueba tripulado que pretende realizar SpaceX en julio, llevó 180 kilos de equipos de prueba a la Estación Espacial, incluido un robot llamado Ripley, repleto de sensores en cabeza, cuello y columna vertebral para evaluar cómo soportaría un humano un vuelo así.
Crew Dragon is on SpaceX’s recovery vessel—completing the spacecraft’s first test mission! pic.twitter.com/6K0qgnHd4O
— SpaceX (@SpaceX) March 8, 2019
Los tres astronautas que integran la tripulación actual de la Estación recibieron la cápsula el domingo. La estadunidense Anne McClain y el canadiense David Saint-Jacques accedieron a la cabina del Crew Dragon para realizar análisis de calidad del aire e inspecciones.
RL
