A pesar de que es uno de los espectáculos celestes más visibles a ojo desnudo desde la Tierra (cuando nos encontramos lejos de la contaminación lumímica de las ciudades) y de que los astrónomos llevan milenios contemplándola con estupor, el verdadero tamaño de la Vía Láctea continúa siendo un auténtico misterio. Las estimaciones son muy peregrinas. Dependiendo de las mediciones podemos decir que la masa de la Vía Láctea está en algún punto entre 700.000 millones y dos billones de veces la masa del Sol. No parece muy preciso el cálculo... Existen algunas limitaciones serias para medir el peso de la Vía Láctea. Una de ellas es que la mayor parte de la masa de la galaxia se compone de materia oscura, es decir, de objetos cósmicos indetectables y, por lo tanto, imposibles de medir. Si se cuentan las estrellas visibles del conjunto galáctico y se estima su masa, solo obtendríamos el 15 por 100 del tamaño real.
Es cierto que se puede calcular la masa de una galaxia, incluyendo su materia oscura, mediante la medición del efecto que su gravedad produce en otras galaxias. Es como si calculamos el peso de una persona por el ruido que hace al caerse de la cama. Aunque la medición no es perfecta. Otro factor dificulta la tarea. Nosotros vivimos dentro de la Vía Láctea de manera que no podemos estudiarla desde fuera, observar sus contornos, medir su luz... Vivir dentro de una caja hace imposible (o muy difícil) saber cuán gruesas son sus paredes.
Las más recientes investigaciones sobre el problema, que se han basado en el análisis del efecto gravitatorio de la Vía Láctea en galaxias satélite, arrojan una masa de unos 960.000 millones de soles. (Casi un billón de veces más pesada que el Sol). El estudio se ha realizado con simulaciones por ordenador. Gracias a potentes programas informáticos se ha imitado el comportamiento de nada más que 90.000 galaxias. Es como crear universos virtuales cuyo comportamiento sí podemos «observar» desde fuera. Aunque solo sea en la pantalla del ordenador. En veinte o treinta años, los científicos estiman que el programa estará suficientemente afinado como para proporcionar una respuesta más certera a la pregunta que hoy nos hemos hecho: ¿cuánto pesa la Vía Láctea?
