Entre nostalgia y anécdotas, cuatro grandes escritores y una de las editoras más importantes dentro de la industria celebran 60 años de Alfaguara, sello que actualmente cuenta con más de siete mil títulos escritos por más de tres mil autores de todo el mundo. Desde la FIL Guadalajara 2024, Rosa Beltrán, Carmen Boullosa, Jorge Volpi y Guillermo Arriaga, escritores cuyas obras han sido materializadas a través de la editorial, compartieron su experiencia dentro de la historia compartida. Así mismo, la ahora directora de la feria, Marisol Schulz rememora cómo a partir del proyecto Alfaguara Global y a través de la novela El Naranjo, de Carlos Fuentes, la editorial dio sus primeros pasos en México. “La sensación de responsabilidad y de tener un inédito de un gigante fue paralizante. A partir de ese momento comienza toda esta etapa de Alfaguara en México. Esta gran etapa de la firma de los mejores autores”, recuerda. Son muchas las manos, palabras y miradas que han sido partícipes de la consolidación del sello cuyas primeras ediciones se caracterizaron por las tapas de libros moradas. “Hay toda una cadena de distintos rangos, distintos trabajos que están detrás de poder llevar un libro a un lector. Reflexionar sobre esto me parece fundamental, definitivamente diseñadores, tipógrafos, gente que está en el almacén, los vendedores”, agrega Schulz.Y es que no es solo se trata de editar, detrás de una publicación hay más de una centena de personas sumando esfuerzos para impulsar la publicación del escrito final. En esa cadena del libro, y de Alfaguara en particular, no se puede dejar fuera ninguna experiencia, especialmente la de los escritores. En este sentido, el otro lado de la historia de la editorial quedó en voz de los autores, quienes coincidieron en dos puntos: el sentimiento de acompañamiento y la existencia de un diálogo continuo que queda finalmente afianzado en una especie de complicidad.“La editorial es una especie de familia y eso es lo que va pasando cuando uno lleva muchos años en una editorial. Claro, como en toda familia disfuncional, siempre hay un familiar excéntrico, de la tía loca. Se forma una familia de autores y editores”, agrega Jorge Volpi.Junto con Beltrán, Boullosa y Arriaga, el autor de "La invención de las cosas" enfatiza lalabor conjunta que ha permitido a la editorial consolidarse como lo que es hoy , recordando siempre que “escribir un libro nunca es un proceso solitario”.LHM
