Cinco horas después de poner en shock al país declarando la ley marcial, Yoon dio marcha atrás y se enfrenta ahora a peticiones de dimisión y una moción de censura
La oposición presenta una moción de censura contra el presidente de Corea del Sur ante el clamor para que dimita por la ley marcial
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, declaró el martes la ley marcial, tachando a la oposición de “fuerzas antiestatales” que amenazan la democracia del país. La inesperada medida de Yoon, la primera vez que se declara la ley marcial en Corea del Sur en más de cuatro décadas, alarmó a Estados Unidos y otros aliados. Cinco horas después dio marcha atrás y levantó la orden ante la oposición unánime. ¿Qué sabemos de la imposición de la ley marcial y qué puede venir después?
En un discurso televisivo de urgencia a la nación, Yoon anunció la imposición de la ley marcial en Corea del Sur y acusó a la oposición de paralizar el gobierno con “actividades antiestatales”.
El nuevo comandante de la ley marcial, el general Park An-su, no tardó en promulgar un decreto de seis puntos: prohibición de actividades y partidos políticos, “propaganda falsa, huelgas y reuniones que inciten al malestar social”.
La orden también sometió a todos los medios de comunicación a la autoridad de la ley marcial y ordenó a todo el personal sanitario, incluidos los médicos en huelga, que volvieran al trabajo en 48 horas.
La medida del presidente remitía a una era de líderes autoritarios que el país no había visto desde la década de 1980. Fue inmediatamente denunciada por la oposición y por el líder del propio partido de Yoon.
Yoon dijo que actuaba para salvaguardar la democracia liberal de su país de “elementos antiestatales” y “amenazas planteadas por Corea del Norte”, pero dio pocos detalles.
Aunque inesperado, el anuncio se produjo en el contexto de una enconada disputa presupuestaria entre Yoon y el opositor Partido Democrático.
La oposición ha recortado unos 4.100 millones de wones (2.800 millones de dólares) del presupuesto de 677.000 millones de wones propuesto por Yoon para el próximo año, lo que llevó al Presidente a quejarse de que se estaban recortando “todos los presupuestos clave esenciales para las funciones básicas de la nación”.
Las fuerzas de seguridad acordonaron la Asamblea Nacional, los helicópteros aterrizaron en el tejado y las tropas entraron en el edificio durante un breve espacio de tiempo, al parecer en un intento de impedir que los diputados accedieran al interior.
Pero 190 diputados consiguieron entrar, votando unánimemente en contra de la declaración de Yoon y pidiendo el levantamiento de la ley marcial.
En el exterior del Parlamento se congregaron cientos de manifestantes, muchos de los cuales corearon cánticos pidiendo la detención de Yoon. Algunos manifestantes forcejearon con las tropas, pero no hubo noticias de heridos o daños materiales importantes. Al menos una ventana se rompió cuando las tropas intentaron entrar en el edificio de la Asamblea. Una mujer intentó sin éxito apartar un rifle de uno de los soldados mientras gritaba “¿No os da vergüenza?”.
Según la Constitución surcoreana, la votación parlamentaria para levantar la ley marcial debe respetarse. Los oficiales militares dijeron inicialmente que, a pesar de la votación, la ley marcial seguiría en vigor hasta que el propio Yoon la levantara.
Pero la oposición se unió. El líder del partido conservador, Poder Popular, de Yoon, calificó de “equivocada” la decisión de imponer la ley marcial.
Lee Jae-myung, líder de la oposición que perdió por un estrecho margen frente a Yoon en las elecciones presidenciales de 2022, dijo que el anuncio de Yoon era “ilegal e inconstitucional”.
El principal partido de la oposición surcoreana, el Partido Democrático, liderado por Lee, calificó la medida del presidente de “golpe de estado”.
Cinco horas después de declarar la ley marcial, Yoon dijo que las tropas volverían a sus cuarteles y que la orden se levantaría tras una reunión del gabinete.
La Casa Blanca se mostró “aliviada” de que Yoon hubiera dado marcha atrás en su declaración de ley marcial. “La democracia es la base de la alianza entre Estados Unidos y la República de Corea, y seguiremos pendientes de la situación”, declaró un portavoz, refiriéndose a Corea del Sur por las iniciales de su nombre oficial, República de Corea.
Anteriormente, Estados Unidos había declarado que observaba con “gran preocupación” los acontecimientos en su aliado asiático clave, donde tiene estacionadas 28.500 tropas ante Corea del Norte.
Raphael Rashid, que informa para The Guardian desde Seúl, escribe que en la mañana siguiente al golpe, el sentimiento en Corea del Sur ha sido de desconcierto y tristeza: “Para la generación de más edad, que luchó en las calles contra las dictaduras militares, la ley marcial equivale a dictadura, no a la Corea del siglo XXI. La generación más joven se avergüenza de que haya arruinado la reputación de su país. La gente está desconcertada. También todo el mundo se pregunta cuál era su objetivo final. Acelerar la destitución es la palabra que está en boca de todos. Desde dentro de la política, Yoon se enfrenta a peticiones de dimisión o destitución”..
Desde el punto de vista político, la presión sobre Yoon no ha hecho más que aumentar tras el shock de esta noche. El principal partido de la oposición ha exigido que Yoon dimita, acusándole de “insurrección”.
El principal sindicato del país también ha convocado una “huelga general indefinida” hasta que dimita por la “medida irracional y antidemocrática”.
El propio Partido Poder Popular de Yoon calificó de “trágico” su intento de imponer la ley marcial y exigió que los implicados rindieran cuentas.
Los partidos de la oposición surcoreana ya han anunciado este miércoles que habían presentado una moción para destituir al presidente, Yoon Suk-yeol, por su declaración de la ley marcial, según informa AFP. “Hemos presentado una moción de censura preparada con urgencia”, dijeron los representantes de seis partidos de la oposición, incluido el principal, el Partido Democrático, en una conferencia de prensa en directo, añadiendo que discutirían cuándo someterla a votación, pero que podría ser este viernes.
