El grupo parlamentario popular registra vía enmiendas una subida del 30% del canon del agua, que Moreno suprimió en 2022 y reactivó en 2023, y recupera la recaudación del Impuesto de Patrimonio, obligando a las grandes fortunas gravar en Andalucía y no en Madrid
Moreno rescata el impuesto al agua en Andalucía tras la subida de tarifas de los grandes ayuntamientos del PP
El Gobierno de Juan Manuel Moreno mantendrá la rebaja en la mayoría de impuestos autonómicos en los Presupuestos andaluces para 2025, pero también subirá y recuperará impuestos que ya había suprimido. Las rebajas aparecen en el anteproyecto de ley de las cuentas que la Consejería de Hacienda llevó al Parlamento hace un mes, pero las subidas no. Esa carga tributaria está en las enmiendas parciales del PP andaluz a su propio Presupuesto, que corregirá la cifra prevista de ingresos desde el bolsillo ciudadano.
Los populares proponen subir un 30% el canon del agua, una tarifa que Moreno suprimió en 2022 -tras las elecciones andaluzas- y lo volvió a implantar con el mismo importe en 2023. Cuando anunció su eliminación, el presidente andaluz cifró “el ahorro estimado para las familias y empresas andaluzas en 140 millones de euros, en torno a 40 euros anuales en la factura del agua”.
En los últimos 12 meses, desde su reimplantación, la Junta ha recaudado 156,1 millones por el impuesto del agua, que es la previsión de ingresos que aparecen en el proyecto de Presupuestos para 2025. Con la subida del 30% que plantea el PP, si llega a aprobarse la enmienda sin cambios, la recaudación aumentaría en 23,4 millones (correspondiente al primer semestre del próximo año), aproximándose a los 180 millones, según la estimación de los populares.
En 2022, las rebajas en el tramo autonómico del IRPF rondaron los 200 millones de euros. Es la diferencia entre lo que recaudó Andalucía y el conjunto del Estado de un impuesto cedido al 50%, y sobre el que el Gobierno central no aplica rebajas. Esos 200 millones son el ahorro para los andaluces de la medida implantada por el Ejecutivo de Moreno. Los socialistas aseguran que ese ahorro se evaporará con la subida del impuesto al agua.
Preguntado sobre esto, el diputado popular y portavoz de Hacienda, Pablo Venzal, se ha hecho un pequeño lío con las cuentas, llegando a cifrar lo que pagarán los andaluces tras la subida del 30% en el canon del agua por debajo del ahorro que calculó el presidente Moreno cuando anunció la supresión de esta tasa. “Son muchas variables, la referenciada, el tiempo pasa, no es lo mismo la tasa ahora que antes...”, ha intentado explicar Venzal.
El portavoz del PP andaluz en el Parlamento, Toni Martín, ha reconocido que es “un pequeño sacrificio” que se le pide a los andaluces, y que el dinero recaudado se destinará a mejorar las infraestructuras hidráulicas de Andalucía. El canon del agua es un impuesto finalista, de modo que obligatoriamente debe reinvertirse en inversiones en materia de agua, contra la sequía o para la depuración de residuos.
Martín ha ligado directamente esta subida fiscal “a los sucedido en la DANA de Valencia”, asegurando que “todos los ingresos del canon del agua lo trasladaremos a Málaga, Almería o Sevilla [las provincias más afectadas por la gota fría en Andalucía] desde la solidaridad de todos los andaluces vamos”. “Es un ensayo con vocación temporal para mejorar las infraestructuras hidráulicas ante lo que ha sucedido. Y puede que más tarde lo replanteemos”, ha añadido.
Lo que no ha quedado claro es por qué una subida de impuestos de este tipo no aparece directamente en el proyecto de Presupuesto Autonómicos para 2025 que hizo público la consejera de Hacienda, Carolina España, hace un mes. Martín ha recordado que Moreno lidera el PP andaluz y también la Junta y, en ese sentido, “trabajan de forma coordinada”. Pero al ser preguntado si el partido y el Gobierno acordaron dejar la subida tributaria fuera del borrador de presupuestos para introducirlos, luego, vía enmiendas, el portavoz de los populares no lo ha aclarado:
“No veo la duda o el problema. Por esa regla de tres, el PP no presentaría enmiendas a los Presupuestos. Me parece muy importante tras lo sucedido en Valencia que se visibilice que esta fuerza política prioriza, incluso por encima de sus intereses de partido, la seguridad de los andaluces. Se trata de un pequeño esfuerzo fiscal frente a otras tantas bajadas que sí están en el Presupuesto”, ha zanjado.
La otra reforma en el Presupuesto que introduce el PP andaluz en su medio centenar de enmiendas es la recuperación del Impuesto de Patrimonio a las grandes fortunas. En este caso, es una reacción a la decisión del Gobierno central de gravar esas fortunas después de que la Junta lo hubiera eliminado.
Moreno anunció el año pasado que los andaluces podrían elegir entre tributar ese impuesto estatal en Madrid o hacerlo en Andalucía, pero aquella fórmula se tradujo para la Junta en una pérdida de más del 30% de la recaudación de esas grandes fortunas. Una de las enmiendas del PP corrige aquella estrategia -más política que económica- para obligar a los grandes patrimonios -con rentas superiores a 3,7 millones - a tributar en Andalucía. La estimación de ingresos ronda los 30 millones.
Los populares explican esta medida de forma muy gráfica: “para que se lo quede Pedro Sánchez, nos lo quedamos nosotros”. Es, en efecto, una reaccción de la Junta a la recuperación del impuesto estatal a las grandes fortunas que implantó el Ministerio de Hacienda precisamente para combatir el dumping fiscal de las comunidades que lo habían suprimido para atraer las mudanzas fiscales, como Madrid y Andalucía. En la práctica, significa que el Ejecutivo de Moreno vuelve a recaudar vía impuestos a los más ricos de esta comunidad.
La subida del canon del agua que implantará el Gobierno andaluz va a rebufo de la subida de tarifas que hace un año ya aplicaron los ayuntamientos de las principales capitales gobernadas también por el PP. La Junta recuperó el impuesto sobre el agua hace un año, después de que las principales corporaciones -como Sevilla, Málaga o Córdoba- incrementasen el gravamen municipal sobre el consumo de agua.
Se generó una. contradicción entre distintas administraciones del PP, unas eliminando un impuesto que otras aumentaban. Moreno siempre dijo que la supresión del canon del agua sería temporal, aunque dejó la puerta abierta a mantenerlo. Los ciudadanos notarán el próximo aumento del 30% en los recibos del consumo doméstico e industrial en 2025.
No es la única contradicción entre el discurso del PP andaluz, que abandera la “bajada masiva de impuestos”, y la “infrafinanciación” que denuncia a diario la Junta, reclamando más recursos al Gobierno central. El canon del agua grava el consumo urbano y se traduce en un ingreso propio de la comunidad autónoma que se reutiliza para financiar las infraestructuras hidráulicas más próximas a la ciudadanía. Cuando el PP andaluz defendió su eliminación, estaba demandando en paralelo mil euros más de financiación al Ejecutivo de Sánchez para afrontar el impacto de la sequía en el PIB autonómico.
Sobre el canon del agua revolotea también la polémica por la falta de ejecución de las partidas presupuestarias consignadas para la mejora de las infraestructuras hidráulicas. En 2019, cuando el PP llega al Gobierno andaluz denuncia un remanente sin usar de 500 millones de euros. Moreno decide agotar primero ese dinero antes que seguir cobrando en canon a los andaluces, anuncia que lo suprimirá durante un año, y que en ese año invertirá en obras hidráulicas lo que se recaudaba por este impuesto, unos 140 millones.
Pero el nivel de ejecución de estas inversiones en 2022 se quedó en 95,4 millones, según datos del Ejecutivo andaluz, lo cual seguía dejando un remanente en el presupuesto para obras hidráulicas próximo a los 400 millones. Los socialistas vienen denunciando desde hace un año la “falta de ejecución de obras declaradas de interés general para Andalucía”, en plena crisis climática por la sequía, mientras la Junta defiende que todo el remanente está “comprometido en actuaciones en marcha o ya programadas.”
En 2023, según las cifras del Ejecutivo andaluz, el nivel de ejecución de infraestructuras hidráulicas alcanzó los 155,7 millones, un 112% más del presupuesto consignado. En el ejercicio 2024, el crédito previsto con el cobro del canon del agua fue de 305 millones y en el mes de octubre, la Junta había gastado 151,7 millones, un nivel de ejecución del 49,7%.
