¿Sabe por qué algunas personas no suben de peso o les cuesta? A continuación, le explicamos los motivos, según la nutricionista especializada en endocrinología metabólica, Haslyn Martínez Díaz, quien fue entrevista por La Nación.
Según Martínez, es poco frecuente que una persona no pueda subir de peso, pero cuando sucede puede deberse a alteraciones hormonales como el hipertiroidismo, problemas en el sistema inmunológico causados por enfermedades autoinmunes como el lupus, mala absorción de nutrientes debido a enfermedades digestivas como la celiaquía, factores genéticos, diabetes descompensada o trastornos alimenticios.
Además, un metabolismo más activo o acelerado puede dificultar el aumento de peso, ya que el cuerpo utiliza más energía de la que consume.
El motivo que podría ser más común para no subir de peso es el hipertiroidismo. Esta afección provoca que la glándula tiroides produzca un exceso de hormonas tiroideas, acelerando el metabolismo y aumentando el consumo de energía.
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Si una persona presenta síntomas como diarrea, cansancio o debilidad que también provocan pérdida de peso, es importante consultar a un nutricionista para identificar la causa subyacente.
Además de seguir las indicaciones de un nutricionista, es recomendable llevar una alimentación variada y rica en calorías. Las semillas de almendra, marañón, maní, chía y linaza son especialmente útiles. Los aceites, como el de oliva, pueden añadirse a las comidas. Consumir proteínas adecuadas también es clave para aumentar la masa muscular; alimentos como leche, yogurt, queso y huevo son recomendados.
El ejercicio, especialmente el de fuerza o resistencia, es esencial para aumentar el peso de manera saludable. Los músculos no solo protegen contra enfermedades crónicas, sino que también mejoran la estabilidad ósea, reduciendo el riesgo de osteoporosis a largo plazo.
La osteoporosis es una enfermedad ósea que se caracteriza por la disminución de la densidad y la calidad del hueso, lo que aumenta el riesgo de fracturas. En las personas con osteoporosis, los huesos se vuelven más porosos y frágiles, y la estructura interna del hueso se debilita.
Para aumentar de peso, se recomienda priorizar carnes blancas como pollo o pescado, ya que tienen menos grasa. Las carnes rojas, como cerdo o res, también pueden consumirse, pero no más de tres veces por semana debido a su potencial inflamatorio, señala Martínez.
Las personas que tienen problemas para perder peso también pueden estar afectadas por alteraciones hormonales como el hipotiroidismo, niveles altos de glucosa en sangre, menopausia, altos niveles de cortisol y, principalmente, inactividad física. La nutricionista destaca que las condiciones de perder o subir peso en exceso son más comunes en mujeres debido a las diferencias hormonales con los hombres.
Es necesario consultar a un nutricionista si se pierde mucho peso durante un periodo determinado, por ejemplo, si pierde más de dos kilos por semana sin motivo aparente. Aunque la pérdida de peso suele considerarse positiva, hacerlo en exceso puede ser problemático.
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El bajo peso puede causar deficiencias nutricionales, con síntomas como piel seca, sangrado en las encías, caída del cabello, uñas quebradizas, cansancio e insomnio.
Díaz afirma que no existe un peso específico ideal para cada persona. Antes se utilizaba un método que asociaba la estatura con el peso, pero los nutricionistas actuales se enfocan en la composición corporal, evaluando la proporción de grasa y masa muscular. La circunferencia abdominal es un buen indicador de salud cardiovascular: menos de 80 centímetros (cm) en mujeres y menos de 94 cm en hombres son rangos saludables. Superar estos valores aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular.
